Improv Everywhere lo ha vuelto a conseguir.
Y es que nadie mejor que este colectivo para traer alegría a un lugar, por el mero hecho de traerla.
Porque no hacen falta más motivos.
En este caso, fueron al aeropuerto JFK, y se pasaron el día recibiendo a completos desconocidos.
Su técnica: buscaban chóferes con carteles, copiaban los nombres en las pancartas y… ¡¡Bienvenidos!!
Ojalá sigan haciendo cosas así por mucho tiempo, y nosotros podamos disfrutarlas.